Finalizando
Ya hace casi hace un mes que estamos en Chile y a falta de una semana para volver a la roquita, empezamos a pensar en la despedida y lo que nos costará aguantar la lagrimilla el último día.
Pero por ahora, sigue el trabajo y siguen las risas entre cuidadores, abuelitos y españolitos (que es así como nos llaman).
El jueves pasado, el abuelo Domingo, Vanessa y yo (Sonia) fuimos hasta Talca, la ciudad más cercana, ya que Domingo tenía que hacerse unas pruebas.
Desde que salimos de la residencia la actitud de Domingo ha cambiando muchísimo.
Su carácter era defensivo y agresivo y desde ese día que estuvimos paseado y comiendo fuera, ya podemos acercarnos a él y al menos darle la mano. Estamos muy contentos porque pensábamos que en este mes no conseguiríamos cambiar su actitud.
En la casa empezamos a pensar en la vuelta; hay que dejarlo todo preparado, hay que empezar a vaciar la nevera, que eso se nos da muy bien, y en menos de lo que pensamos tendremos que empezar a hacer la maleta.
¡El tiempo pasa volando!
En general estamos muy contentos y orgullosos del trabajo que hemos realizado.
En estos últimos días que nos quedan los vamos a aprovechar al máximo con todos ellos.
Valoramos mucho el cariño de la gente de Curepto y su agradecimiento, será imposible olvidar esta experiencia tan gratificante y bonita que nos ha enseñado a valorar y a ver otra realidad.
Neus Pozuelo y Sonia Cabello.